Chainsaw Man: los finales más locos que podrían pasar
Los finales… ay, los finales. Pueden arruinarte toda una historia o dejarte pensando durante días. En el anime, los cierres suelen ser una apuesta arriesgada: algunos se convierten en leyenda, como los de Fullmetal Alchemist: Brotherhood o Cowboy Bebop; otros, como Darling in the Franxx o incluso Death Note, dividen a la audiencia como si fueran una religión. Pero claro, con Chainsaw Man… ni siquiera hemos llegado al final. Y eso es justo lo que vuelve loca a la comunidad.
Desde que MAPPA se animó (nunca mejor dicho) a adaptar el manga de Fujimoto, Chainsaw Man ha estado en boca de todos. Y mientras la historia sigue expandiéndose sin un rumbo fijo, no dejan de aparecer teorías —unas salvajes, otras geniales, algunas puras locuras— sobre cómo podría acabar todo este festival de sangre, demonios y existencialismo. Aquí te dejamos las más potentes.
1. Denji termina siendo… ¿un mesías?

Suena exagerado, pero escúchame: Denji siempre ha sido una figura de extremos. Comenzó como un chico pobre, vendiendo partes de su cuerpo. Terminó siendo un símbolo de liberación para muchos —literalmente adorado por multitudes como “el Chainsaw Man”. ¿Eso no suena sospechosamente bíblico?
Lo que empezó como humor negro ha tomado un giro inquietantemente serio. Denji es el único híbrido que puede eliminar demonios hasta del recuerdo. Su figura se convierte en esperanza viva. Algunos creen que podría liderar una especie de “revolución espiritual”, donde los humanos y demonios dejen de odiarse.
Su poder ya despierta devoción fanática en el universo de la historia. Si eso evoluciona hacia una especie de religión —o un nuevo orden mundial— estaríamos ante un cierre con tintes apocalípticos y religiosos. Y sí: Denji como Mesías suena ridículo… hasta que pasa.
2. Nayuta, la nueva encarnación del Demonio del Control

Tras la muerte de Makima, el temido Demonio del Control no desapareció. Se reencarnó en Nayuta, una niña aparentemente inocente que ahora vive con Denji. Pero… nada es tan simple en este mundo. ¿Puede alguien con el poder de manipular la voluntad ajena crecer sin corromperse?
Denji intenta ser una figura paternal, pero no está emocionalmente preparado para criar a una entidad que, en su versión anterior, lo destruyó por dentro. Muchos creen que Nayuta heredará el rol de Makima —pero desde una óptica diferente. ¿Será redención o repetición del ciclo?
Además, Fujimoto no introduce un personaje así por puro simbolismo. Nayuta será clave. Puede convertirse en aliada final… o en la peor amenaza disfrazada de hermana pequeña. Y Denji tendrá que elegir: ¿protegerla o detenerla?
3. El regreso de Power cambiará las reglas del juego

“Búscame cuando renazca”, le dijo Power a Denji antes de desaparecer. Esa frase ha mantenido vivo el deseo de millones de fans: verla regresar. Pero su regreso no sería solo un premio emocional; sería un cambio en las reglas del juego.
Power, como el Demonio de la Sangre, puede reencarnarse si se alimenta de suficiente sangre. Y si Denji logra hallarla —tal vez en el infierno, como ella misma sugirió—, podríamos ver a una Power distinta: más fuerte, más inestable, quizás incluso corrupta.
Su retorno podría representar el corazón de la batalla final, o una gran tragedia: ¿qué pasa si regresa… y no recuerda a Denji? ¿O si se vuelve en su contra? El lazo entre ellos fue demasiado profundo como para que Fujimoto lo deje inconcluso.
4. El cuarto jinete del Apocalipsis está por llegar: la Muerte

Ya conocimos a Control (Makima), Guerra (Yoru) y Hambre (Fami). Pero falta el más temido: el Demonio de la Muerte. En el mundo de Chainsaw Man, los demonios existen según el miedo humano —y ningún miedo es más universal que el de morir.
La llegada del Demonio de la Muerte podría no solo cambiar la historia, sino destruir la lógica misma del universo. Un ser así no necesita pelear; basta su presencia para que el mundo tiemble. Muchos creen que ya está actuando en las sombras, manipulando los eventos desde el principio.
Este demonio sería el jefe final. Pero también puede ser un reflejo último de los temas del manga: el miedo a desaparecer, a no dejar huella, a ser olvidado. Si llega, no será solo una pelea. Será existencial.
5. Chainsaw Man podría reiniciar el mundo

Denji no solo mata demonios. Él los borra. Los elimina del recuerdo colectivo. Eso lo hace diferente a cualquier otra fuerza en el universo de la serie. Algunos teorizan que podría usar ese poder para eliminar todos los miedos… y empezar de cero.
Un “borrón y cuenta nueva” donde la humanidad no recuerde ni a los demonios, ni al sufrimiento que los creó. Sería una utopía… o una pesadilla vacía, sin emociones, sin historia. El precio de la paz sería olvidar quiénes fuimos.
Esta teoría se siente como una forma elegante y brutal de cerrar la historia. El Chainsaw Man como arma del olvido. El mundo reseteado. Y Denji… quizás, desaparecido también.
6. La humanidad es la verdadera fuente del mal

¿Y si los demonios son solo víctimas de nuestros miedos? Esta teoría da un giro completo: los verdaderos villanos no son los demonios, sino la humanidad. Nosotros les dimos forma. Nosotros los alimentamos con terror, culpa y trauma.
Esto recontextualiza todo el conflicto. Las masacres, el control, la guerra… todo nace en nuestro interior. Makima, Yoru, Fami… son reflejos amplificados de nuestras peores partes. Denji no está luchando contra monstruos: lucha contra lo que significa ser humano.
Un final así sería demoledor. No hay enemigo a destruir. Solo queda enfrentarse al espejo… y decidir si seguimos huyendo de lo que somos o lo aceptamos.
7. Una vida normal sería el castigo definitivo para Denji

Paradójicamente, lo que Denji más deseó —una vida sencilla— podría ser su peor condena. Imagina esto: sin batallas, sin sangre, sin monstruos… solo despertarse temprano para ir al trabajo, pagar cuentas, limpiar el piso.
Para alguien como él, que solo ha sentido que vive cuando está al borde de la muerte, la rutina puede ser una cárcel. Este final no sería trágico en apariencia. Pero sería agónicamente silencioso. Una muerte lenta, sin motosierras, sin gloria.
Y lo peor: la sociedad lo vería como un “final feliz”. Pero tú y yo sabríamos que no lo es.
8. Los demonios no son villanos: solo espejos

Los demonios no son malvados per se. Son manifestaciones. Ideas hechas carne. Si los humanos temen a la oscuridad, existe el Demonio de la Oscuridad. Si temen al control, existe Makima. Así funciona este universo.
Entonces… ¿por qué seguimos juzgándolos como monstruos? Esta teoría plantea que el final revelará la verdadera naturaleza de los demonios: no son enemigos, sino advertencias vivas.
Tal vez el camino no es destruirlos, sino aprender a convivir con ellos. Integrar lo que tememos. Aceptarlo. Como diría Jung: lo que no enfrentamos, nos controla. ¿Y si eso es lo que Chainsaw Man ha tratado de decirnos desde el principio?
9. Denji se sacrifica, como lo hizo Pochita

Esta es la teoría que más lágrimas arranca. Denji empezó como un niño salvado por su mascota. ¿Y si su historia termina haciendo lo mismo por los demás?
Un sacrificio final para romper el ciclo de dolor. Un acto de amor puro, brutal, a lo Pochita. Tal vez para proteger a Nayuta. Tal vez para borrar al Demonio de la Muerte. Tal vez solo para darle al mundo una oportunidad.
Sería un final trágico, pero también justo. Porque Denji, al final, aprendió a amar. A cuidar. Y a dar su vida por algo que vale la pena. Un susurro final de motosierras… y silencio.
10. El final será un trolleo absoluto

No olvidemos con quién estamos tratando. Fujimoto es un autor que adora romper las reglas. ¿Y si el final de Chainsaw Man no es épico, ni trágico, ni siquiera coherente? ¿Y si todo acaba en un sketch absurdo, con Denji montando una panadería y Power como cajera?
Puede parecer absurdo, pero sería perfectamente coherente con el tono de la obra. Fujimoto ha jugado desde el principio con nuestras expectativas. Tal vez su cierre no sea una conclusión, sino un cuestionamiento sobre la necesidad misma de los finales.
Y si eso pasa… nos enojaremos, sí. Pero también hablaremos de ese final durante años. Porque así es como funcionan las grandes obras: no siempre te dan lo que quieres, pero nunca las olvidas.
¿Y tú qué final prefieres?
Después de todo esto, solo hay una pregunta importante: ¿cómo te gustaría que terminara Chainsaw Man? ¿Con sangre? ¿Con lágrimas? ¿Con una risa absurda?
Sea cual sea el camino que elija Fujimoto, estamos listos para el viaje. Y si algo hemos aprendido… es que jamás hay que confiar en lo que parece obvio.